Escándalo en México: quién es el futbolista al que comparan con Mauro Icardi por “robarle” la novia a otro jugador
Martín Rodríguez y Luciano Bocco no están en el radar de un club argentino. Tampoco son figuras en sus clubes: el primero nació en Chile, tiene 24 años y es delantero de los Pumas de la UNAM; el otro es mexicano, de apenas 19 años y por ahora es sólo una de las promesas de las Inferiores del Cruz Azul. Sin embargo, hay algo que los une. O al menos eso aseguran en el país azteca luego de que a Bocco lo señalaran como el nuevo Mauro Icardi por haberle «robado» la novia a su colega.
Si bien ya pasaron casi seis años, el recuerdo de lo que ocurrió entre Icardi, Maximiliano López y Wanda Nara aún está fresco. Cuando el matrimonio de la rubia con el ex delantero de River llegó a su fin muy pocos se imaginaban que detrás de esa separación se escondía una historia que tenía traiciones, un nuevo romance y una vendetta que dura hasta estos días.
A diferencia de lo que ocurrió entre los futbolistas argentinos, hay que aclarar que Rodríguez y Bocco no eran grandes amigos, pero sí que se conocían ya que antes de pasar a Pumas el primero había estado en Cruz Azul..
Todo comenzó cuando Rodríguez, de un día para el otro, borró de sus redes sociales las imágenes que tenía junto con Alejandra Valdéz, una modelo también chilena con la que vivía un apasionado noviazgo. La crisis primero le dio lugar al silencio, pero no pasó demasiado tiempo hasta que se filtró que la voluptuosa morocha le había sido infiel y había caído en los brazos de otro futbolista.
El primero que quedó en la mira fue otro jugador chileno, Igor Lichnovsky, quien era amigo tanto de la joven como de Rodríguez. Sin embargo, fue apenas una pantalla. En realidad, Alejandra había comenzado una relación con Bocco, quien además de ser un ferviente evangelista, es el hijo del director técnico del equipo femenino del club cementero.
Tras la confirmación del engaño y el nuevo affaire, Rodríguez quiso desterrar de su vida todo lo que le recordara a Alejandra. Por eso eliminó todas las fotos en las que se los veía juntos y felices. Sin embargo, hay un detalle clave que jamás va a poder borrar: ¡lleva tatuado en su antebrazo derecho la cara de su (hoy) ex novia!
El grabado, de hecho, se lo hizo en enero de este 2019 y en contra de las recomendaciones de sus amigos y de su familia, que le señalaron que era mejor esperar a que la relación se consolidara más, ya que la modelo chilena había tenido antes una relación con otro futbolista llamado Felipe Flores, al cual había dejado por Martín Rodríguez…
Luego de que el tema tomara conocimiento público, los medios mexicanos comenzaron a hacerse un festín. Y no tardaron en bautizar a Bocco como el nuevo Icardi, una comparación que al rosarino no hay dudas que le va a caer mal. Aunque con un casamiento y dos hijas en común con Wanda, a Mauro poco le deba importar.