Semana del Agua: Buenos Aires se posiciona como líder regional en adaptación al cambio climático

Con la apertura de la primera Semana del Agua en Buenos Aires, la ciudad da un paso firme hacia la consolidación de su liderazgo en las estrategias de adaptación al cambio climático, enfocándose en el cuidado del agua, su recurso más vital.

En medio de fenómenos climáticos cada vez más impredecibles, Buenos Aires inaugura su propia versión de la Semana del Agua, un evento internacional que busca concienciar sobre la gestión sostenible del agua. “Es momento de poner el tema en la agenda y articular esfuerzos para cuidar el agua y el medio ambiente”, afirmó Jorge Macri, Jefe de Gobierno porteño, en la apertura de la Conferencia del Agua, celebrada en la sede del Gobierno de la Ciudad.

La Ciudad de Buenos Aires vive hoy un momento clave en su lucha contra el cambio climático. Con la inauguración de la Semana del Agua, el gobierno local refuerza su compromiso con la gestión sostenible de este recurso esencial, buscando no solo concientizar, sino también movilizar a la sociedad y a los sectores privados y públicos en la tarea de garantizar un futuro más resiliente. Este evento, que se celebra anualmente en Estocolmo, llega por primera vez a la capital argentina en un contexto global marcado por eventos climáticos extremos que golpean con mayor fuerza a las ciudades costeras.

Durante la apertura de la conferencia, el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, destacó la importancia de un trabajo conjunto para enfrentar el impacto de fenómenos como las inundaciones y las sequías. “Enfrentamos una realidad que se manifiesta con fenómenos climáticos traumáticos cada vez más intensos e impredecibles. Eso nos obliga a poner el tema en agenda para articular esfuerzos sobre el cuidado del ambiente y específicamente del agua», expresó Macri, dejando claro que la ciudad no solo mira al futuro, sino que también busca soluciones inmediatas a los desafíos del presente.

Acompañado por el ministro de Infraestructura de la Ciudad, Pablo Bereciartua, y el ministro de Seguridad, Waldo Wolff, Macri subrayó que el agua es un eje fundamental de la política pública porteña desde hace más de 16 años. “Buenos Aires es una ciudad costera, y el agua forma parte de nuestra identidad. A lo largo de nuestra historia, la ciudad nació y creció junto al río, pero por mucho tiempo le dimos la espalda. Hoy, queremos recuperar esa relación con el agua, con el río», sostuvo el Jefe de Gobierno.

Además, Jorge Macri insistió en que la recuperación de los espacios costeros es uno de los pilares de su gestión. “En los últimos años hemos recuperado más de 17 hectáreas de costa y hemos avanzado en el saneamiento del Riachuelo, uno de los mayores desafíos ambientales de la región. No es una tarea sencilla, pero estamos convencidos de que podemos lograrlo», afirmó.

El Plan Hidráulico, que actualmente se está implementando en la ciudad, se presentó como la columna vertebral de las políticas públicas orientadas a mitigar los efectos de las inundaciones. Con más de 45 kilómetros de extensión, el plan busca proteger a los vecinos de las zonas más vulnerables mediante obras de encauzamiento y conducción de los 11 arroyos que atraviesan la ciudad, los cuales desembocan en los ríos Matanza-Riachuelo y Río de la Plata.

Pablo Bereciartua, ministro de Infraestructura, amplió detalles sobre el Plan de Adaptación al Agua, una herramienta diseñada para complementar el Plan Hidráulico y reducir el riesgo de inundaciones, un fenómeno cada vez más recurrente en la ciudad debido a las intensas lluvias provocadas por el cambio climático. «Buscamos un compromiso colectivo para la conservación y gestión eficiente del agua en todas sus dimensiones y fortalecer nuestra responsabilidad con un futuro sostenible», indicó Bereciartua.

El encuentro de este año también reunió a expertos internacionales, representantes del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, quienes participaron de una serie de mesas de debate y talleres sobre las mejores prácticas para la gestión del agua y la resiliencia urbana frente a las crisis climáticas. La participación de universidades y centros de investigación también fue crucial para aportar un enfoque técnico y académico a las estrategias presentadas durante la conferencia.

El gobierno de la Ciudad, además de enfrentar los desafíos inmediatos, busca sentar las bases para una Buenos Aires más verde, más sostenible y con mayor integración con su entorno natural. En este sentido, el trabajo con los barrios ribereños, la recuperación de espacios verdes y la planificación urbana inteligente son piezas claves en su visión a largo plazo.

Con la Semana del Agua, Buenos Aires se posiciona como referente regional en la gestión del agua y la adaptación al cambio climático. A medida que el evento avanza, queda claro que solo con un enfoque integral y colaborativo será posible enfrentar los retos que nos depara un clima cada vez más impredecible y desafiante.