Jorge Macri y líderes religiosos celebran la unidad en la bendición del pesebre en el Parque de la Navidad
El Jefe de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, acompañado de referentes católicos, evangélicos y anglicanos, encabezó la bendición del pesebre del Parque de la Navidad, en un acto que simboliza la unidad religiosa y el espíritu de las fiestas.
En un acto de unión y diversidad religiosa, el Jefe de Gobierno de Buenos Aires, Jorge Macri, junto a referentes de las comunidades católica, evangélica y anglicana, participó de la bendición del pesebre en el Parque de la Navidad, un evento que se celebra hasta el 23 de diciembre en la Plaza Seeber, Palermo. “El significado del pesebre va más allá de una religión. Nos invita a abrazar la diversidad de creencias y unirnos en ese sentimiento navideño”, destacó Macri, subrayando la importancia de la convivencia pacífica entre las diferentes creencias y el fortalecimiento de la fraternidad.
La bendición del pesebre, que se realizó en el corazón de uno de los parques más emblemáticos de la ciudad, estuvo a cargo de figuras de renombre como el Arzobispo de Buenos Aires, Monseñor Jorge García Cuerva, el obispo de la Iglesia Anglicana Argentina, Reverendo Brian Williams, y el Presidente de la Asociación Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina, Pastor Christian Hooft. “Las Fiestas son un momento para valorar y agradecer por nuestra familia, amigos y afectos. Son momentos también para acercarnos a alguien con el que tal vez no estuvimos bien”, dijo Macri, remarcando que estos días festivos son ideales para fortalecer los lazos de unidad y solidaridad.
El evento no solo fue un acto religioso, sino que se convirtió en una celebración que incluyó diversas actividades para toda la familia. El Parque de la Navidad, ubicado entre la Avenida Del Libertador y la Avenida Sarmiento, abrió sus puertas entre las 17 y las 22 horas, ofreciendo juegos para niños, un parque inflable, y la posibilidad de escribir cartas a Papá Noel. En un ambiente festivo, los asistentes pudieron disfrutar de música en vivo, foodtrucks con delicias para todos los gustos y espectáculos para toda la familia.
Además, se habilitaron espacios como la Fábrica de Regalos, la calesita con motivos navideños y un Correo Navideño para que los más pequeños pudieran enviar sus cartas al simpático personaje de la Navidad. Jorge Macri resaltó que la Ciudad de Buenos Aires, que fue declarada en 2016 como Ciudad del Diálogo Interreligioso, se enorgullece de su tradición de convivencia armónica entre diferentes creencias religiosas. “La fe, lejos de dividirnos, nos une”, afirmó, haciendo un llamado a la tolerancia y al respeto mutuo en tiempos tan significativos como las fiestas navideñas.
La gestión actual, que tiene como objetivo posicionar a la Ciudad como la capital mundial del diálogo religioso, continúa promoviendo la interacción entre comunidades de distintas confesiones a través de actividades como esta, que fomentan la cooperación y el entendimiento entre grupos con creencias diversas. En este contexto, el Parque de la Navidad se ha consolidado como un lugar emblemático donde se celebra la fraternidad y la diversidad, dos pilares fundamentales de la sociedad porteña.
Como parte de las actividades especiales, se organizó un Mercado Navideño que abrió sus puertas el 20 de diciembre, y ofrecerá productos tradicionales hasta el 23 de diciembre, brindando una opción más para quienes busquen vivir la magia de la Navidad en familia. Además, durante el fin de semana se realizarán desfiles con la participación de artistas itinerantes y Papá Noel, quien recorrerá el parque en su imponente carroza, acompañado de sus ayudantes. Los niños tendrán la oportunidad de tomarse fotos con Papá Noel, para lo cual deberán anotarse previamente a través de un sistema de inscripción vía WhatsApp.
Este evento no solo es una tradición para los porteños, sino un espacio de encuentro para miles de familias que se reúnen para vivir el espíritu navideño. Es un recordatorio de cómo las diferencias religiosas no deben ser barreras, sino puentes que unen a las personas en valores comunes como la paz, la esperanza y la solidaridad.
Así, el Parque de la Navidad se reafirma como un símbolo de la diversidad y la fraternidad en Buenos Aires, un lugar donde las familias pueden disfrutar de la magia de la Navidad mientras celebran los valores de unidad y respeto que hacen única a la ciudad.