Escuelas que respiran de nuevo: el impacto real del Ministerio Sustentable en las aulas porteñas 🌱📚
Un programa silencioso pero transformador avanza por las escuelas de la Ciudad: liberar espacios, recuperar rincones olvidados y convertir el desorden en oportunidades. Desde Palermoweb fui testigo directo de cómo cientos de instituciones comienzan a ganar aire, seguridad y funcionalidad gracias a un trabajo meticuloso y sostenido.
Como periodista, y sobre todo como vecino que recorre escuelas a diario, puedo afirmar que pocas políticas públicas generan efectos tan palpables como el Programa Ministerio Sustentable: en apenas un año permitió retirar más de 9.500 muebles en desuso de más de 200 escuelas. Y lo que parece un simple movimiento de objetos, en realidad está cambiando la forma en que miles de chicos viven y aprenden cada día. ✨
En el Programa Ministerio Sustentable, el proceso arranca con un diagnóstico exhaustivo en cada institución. Yo mismo presencié cómo los equipos identifican mobiliario y materiales que hace años dejaron de cumplir una función. Son objetos que, por costumbre o falta de recursos, fueron ocupando aulas, esquinas, pasillos y depósitos hasta volverlos inservibles.
Lo sorprendente es que con cada retiro se producen transformaciones inmediatas:
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Aulas que estaban bloqueadas vuelven a abrirse y reciben a nuevos cursos.
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Depósitos antes saturados se ordenan y se convierten en áreas útiles.
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Pasillos históricamente colapsados recuperan circulación segura.
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Rincón por rincón, los espacios se resignifican y se vuelven habitables.
Pero el programa no se queda en la superficie. Cada objeto retirado tiene un destino pensado:
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Los elementos en buen estado se reutilizan en otras escuelas que los necesitan.
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Los bienes deteriorados ingresan en circuitos formales de reciclaje o disposición final responsable.
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Heladeras, pequeños electrodomésticos y equipos eléctricos reciben un tratamiento específico para evitar impacto ambiental.
En el caso de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) pude ver cómo se trabaja directamente con Cooperativas de Recuperadores Urbanos, lo que garantiza un proceso seguro, ambientalmente correcto y socialmente inclusivo. Es economía circular real, aplicada donde más sentido tiene: en el corazón del sistema educativo.
Lo que más me impresionó es el cambio de energía en las escuelas. Cuando un aula vuelve a ser aula, cuando un pasillo se despeja, cuando un depósito respira, también cambia el ánimo de directivos, docentes y estudiantes. Se ordena el espacio, pero también se ordena la vida institucional. Y eso se nota.
Porque a veces, para que una escuela vuelva a crecer, primero hay que devolverle el espacio para respirar. 🌿📘