Exposición Rural 2019: el stock, los kilos y el financiamiento, en la mira de las razas
La mesa está servida. Los comensales están llegando. Están los mercados que buscan cantidad pero también los de alta gama. Todos quieren carne argentina. El asunto ahora es ver cómo se articula toda la cadena cárnica, pero también el Estado a través de políticas, para afrontar ese desafío.
En el marco de la 133ra. Exposición Rural 2019, referentes de las cuatro principales razas carniceras del país dialogaron con Agronomiaweb sobre todo lo que se puede hacer y mejorar en el campo, a través de los recursos genéticos y el manejo, pero también en medidas económicas y políticas que favorezcan la adopción de tecnologías o la posibilidad de retener animales (sean vientres para multiplicar terneros o novillos para engordarlos más).
Este año hubo más animales inscriptos en todas las razas. Angus desembarcó con 431 ejemplares de 95 cabañas (20% más que en 2018), Braford llegó con 130 animales de 30 cabañas (5 debutantes) y Brangus con 130 animales de 45 establecimientos y Hereford con 103 animales.
El ámbito palermitano fue el lugar elegido por la raza Angus para presentar los avances en el primer Programa de Evaluación Genómica del país y América latina. “Se trata de un cambio fundamental en el uso de datos objetivos, que tiene como particularidad, trabajar por primera vez con el ADN, lo que ofrece varias ventajas, por ejemplo, la evaluación de reproductores jóvenes”, explicó el vicepresidente de la Asociación Argentina de Angus, Alfonso Bustillo (asumió en el marco de la Exposición Palermo como presidente del Foro de Genética Bovina).
El uso de estos reproductores jóvenes permitirá bajar el intervalo generacional, acelerando el progreso genético de las principales características de interés económico, tanto en cabañas como en rodeos comerciales. “Nuestro programa de Evaluación de Reproductores Angus cumple 30 años en 2019, sobre esta plataforma ahora presentamos los DEPs enriquecidos con genómica”, explicó Bustillo.
“Al igual que un agricultor no compra semilla si no sabe sus características, criadores no pueden comprar reproductores sin información genética”, apuntó Bustillo y contó que ya trabajan en la búsqueda de DEPs genómicos de la docilidad, peso de vaca adulta y eficiencia de conversión de alimento.
“Hace varios años definimos el biotipo ideal a partir de un tamaño moderado, muy carnicero, animales anchos y largos con buen porcentaje de carne en los cortes valiosos, fuertes para lograr novillos pesados pero con mansedumbre”, repasó el presidente de la Asociación Argentina de Criadores de Hereford, Alejandro de La Tour.
“Al igual que un agricultor no compra semilla si no sabe sus características, criadores no pueden comprar reproductores sin información genética”, apuntó Bustillo y contó que ya trabajan en la búsqueda de DEPs genómicos de la docilidad, peso de vaca adulta y eficiencia de conversión de alimento.
“Hace varios años definimos el biotipo ideal a partir de un tamaño moderado, muy carnicero, animales anchos y largos con buen porcentaje de carne en los cortes valiosos, fuertes para lograr novillos pesados pero con mansedumbre”, repasó el presidente de la Asociación Argentina de Criadores de Hereford, Alejandro de La Tour.
Al referirse al biotipo deseado, la presidenta de la Asociación Braford Argentina, Tiziana Prada, destacó “un animal funcional, de tamaño moderado, buena estructura, con gran capacidad ruminal” porque “esto le permite convertir mejor el pasto en carne en zonas donde no hay pastos de gran calidad”.
En la evolución, Prada destacó que “antes era un animal mas acebuzado, que ahora fue incorporando carne y calidad, son rústicos, con buena terminación y dóciles, algo importante pensando en la cantidad de personal que se necesita para manejarlos”.
Según datos de CABIA (Cámara Argentina de la Biotecnología de la Reproducción e Inseminación Artificial) las ventas de semen en el mercado interno muestran como líder a la raza Angus (negro y colorado) con 44%, luego Brangus con 26,5%, Braford con 16% y Hereford con 12%.
Mercados y desafíos
“Siempre esperamos Palermo con mucha expectativa, más este año con la apertura de mercados como China, el reciente acuerdo Mercosur-Unión Europea, incluso la apertura para hacienda en pie de Kazajistán y Azerbaiyán, además de Chile, vemos un año que va a ser bueno para la ganadería en general”, apuntó La Tour.
“La tecnología y las ganas de hacer las cosas bien están, la genética está y los mercados también, pero falta plata para poder aumentar la oferta, recomponiendo y aumentando el stock con mejores índices de preñez y destete”, resumió Prada para quien “con la apertura de nuevos mercados la demanda no tiene techo”.
Pero para despegar, se necesitan líneas de créditos accesibles. “Al no tener espaldas para aguantar a un animal con más kilos terminamos vendiendo un envase caro y de calidad sin llenar al 100 por ciento”, justificó Prada.
Hembras en rojo
Uno de los temas que preocupan a todas las razas y a la cadena cárnica en general es la faena de hembras. Una participación del 52% en la faena total, con 334.000 vaquillonas enviadas al frigorífico el mes pasado (150% más que el año pasado) encienden las alarmas de la “fábrica”.
Días atrás, siete asociaciones de criadores presentaron un documento a la Mesa de Enlace alertando sobre el tema. “Presentamos una alarma porque vemos que China es un mercado que absorbe todo y esas vacas gordas se pagan lo que vale una hembra de reposición”, dijo Bustillo.
En una misma línea, Prada reconoció como un “gran problema” que se estén “vendiendo vientres a poco precio, cuando deberían poder retenerse”. También para La Tour se necesita trabajar en cuestiones impositivas y de financiamiento para propender al crecimiento con retención y compra de vientres así como para una amortización acelerada de reproductores que promueva la incorporación de genética probada por parte de los productores.
El objetivo es ser escuchados para conseguir financiamiento especial que favorezca la retención de vientres.
Desafíos
“La demanda mundial de carnes de calidad está muy activa, y nosotros tenemos el sello de la carne argentina, por eso la apertura de nuevos mercados configura un horizonte muy promisoriopara todo el negocio”, opinó Rivolta.
Entre las preocupaciones, o temas a resolver para apalancar el crecimiento, La Tour apuntó a la capacitación para un mejor uso de herramientas de todo tipo: “Hoy hay una diferencia grande entre los productores de punta y el resto, el desafío de todas las razas, es que se adopten herramientas que permitan a todos los productores aumentar la eficiencia productiva rompiendo esa brecha”. Y agregó: “Tenemos que inculcar que los productores entiendan el valor de contar con un animal probado, tenemos muchos datos de los que pueden servirse para elegir el animal que necesitan”.
En lo que respecta al mercado interno, para La Tour hay que dejar ya de lado el sistema de comercialización por media res y por peso. “Debemos tener un sistema basado en la calidad de carne, en el que se está trabajando pero todavía no está, lo mismo que se venda el animal despostado en vez de la media res”, opinó el presidente de la Asociación de Criadores de Hereford.
Además de quitar las retenciones, para Bustillo sería fundamental que se avance definitivamente en la tipificación pero además “la industria debería encontrar la forma para premiar al productor que le lleve un animal con carne de calidad, no debería pagarse lo mismo 3-4% de grasa intramuscular que 1 o 2”.
La mesa está servida. Buen apetito.