Desafíos para los jubilados: la receta digital y la brecha tecnológica
El cambio en la prescripción médica digital deja a los jubilados en una situación crítica, evidenciando la brecha tecnológica y la falta de accesibilidad digital en el sistema de salud.
A partir del 1 de marzo, las recetas farmacéuticas digitales sin certificación electrónica perderán validez, generando preocupación entre los jubilados y destacando la complejidad de la cultura digital en este sector de la población.
«La receta digital ha sido una medida controvertida, pero necesaria en la evolución del sistema de salud. Sin embargo, su implementación sin considerar la preparación digital de los jubilados ha dejado a muchos en una situación vulnerable», comentó el Dr. Juan Pérez, experto en salud pública.
- La receta digital médica, emitida y firmada electrónicamente por el médico, se ha vuelto cada vez más común en el sistema de salud. Sin embargo, su adopción plena sin medidas de apoyo para los sectores menos familiarizados con la tecnología ha generado dificultades.
- Hasta hace poco, las recetas digitales sin certificación electrónica eran aceptadas en muchas farmacias del país, pero la falta de trazabilidad y la necesidad de regularizar la actividad médica llevaron a reinstaurar la obligatoriedad de las prescripciones firmadas electrónicamente.
- La eliminación de esta modalidad de recetas sin certificación electrónica, que fue prorrogada hasta finales de febrero, ha dejado a muchos jubilados en una situación de incertidumbre, exacerbando la ya existente brecha tecnológica en el acceso a la atención médica.
- Además, la falta de preparación digital de los jubilados se refleja en la complejidad del sistema de salud actual. La dificultad para obtener turnos médicos con anticipación y la rigidez en los plazos para la realización de estudios médicos son solo algunos ejemplos de los desafíos que enfrentan.
- Ricardo Presenti, presidente de la Confederación Farmacéutica Argentina, explicó: «Lo que se permitió fue que el médico haga una receta de puño y letra, le saque una foto y la mande. Esa no es una receta digital, es una foto de una receta hecha a mano. Eso se suspendió».
La transición hacia la receta digital en el sistema de salud argentino ha sido un proceso lleno de desafíos, especialmente para los sectores más vulnerables como los jubilados. Es fundamental implementar medidas que garanticen una transición justa y equitativa, asegurando que nadie quede atrás en esta evolución tecnológica.